El nuevo uniforme del Guadalajara ya puede presumir un título... aunque sea amistoso. Durante el estreno de la polémica vestimenta que utiliza por primera vez el short en color rojo, Chivas derrota al Atlas por 3-1 para llevarse el trofeo de campeón en la Copa Jalisco, en un Clásico Tapatío que termina "caliente", entre gritos de Leandro Cufré, quien ha encarado al técnico Benjamín Galindo en la banca rojiblanca.
Arranque explosivo del Rebaño. Es apenas la primera aproximación del encuentro. Jesús Sánchez vive tiempos de revancha después de un torneo para el olvido. Benjamín Galindo lo tiene contemplado como titular para el Apertura 2013 del Futbol Mexicano. Y aunque apenas es la pretemporada, responde.
"El Chapo" se adueña del sector derecho. Hace todo bien: se quita un rival de encima, con velocidad; levanta la mirada hacia el área; envía un servicio preciso. Miguel Sabah se levanta. Gira el cuello con fuerza. Conecta con colocación. Estremece las redes. Gol de Chivas, apenas al minuto 2.
Pero la anotación, lejos de ayudar al Guadalajara, le perjudica. Cede la iniciativa. Atlas la toma. Se apropia de la pelota. Y en el futbol, la regla no escrita establece condiciones: quien tiene el balón, controla el encuentro. Se juega, a partir de entonces, como los Rojinegros quieren. Omar Bravo se convierte en un constante dolor de cabeza para la defensa rojiblanca.
El Rebaño apuesta por un contragolpe y casi le da resultado, pero en un latigazo de tres ofensores contra dos defensores, "El Chapo" Sánchez equivoca el servicio y deja escapar la gran oportunidad. Tras el susto, la insistencia de los Zorros es incesante. Encuentra recompensa poco después.
Los últimos rayos solares acarician el césped del Estadio Jalisco. Las luminarias, sin embargo, se encuentran ya encendidas. La mitad de ellas se apaga. El árbitro Marco Antonio Ortiz decide detener el encuentro. Nueve minutos más tarde, los capitanes de ambos equipos, junto con el silbante, deciden reanudar el duelo con la poca luz natural que resta.
Hacia el final del primer tiempo, ya con el alumbrado del estadio funcionando a plenitud, se genera de nuevo emoción en la tribuna, que presenta una regular entrada. Giovani Hernández exige a Miguel Pinto con la ejecución de un tiro libre, que el arquero desvía la pelota con un lance medido. El 1-1 permanece al medio tiempo.
En el inicio del complemento, los dirigidos por Omar Asad tienen nuevamente costosas desatenciones. Jesús Sánchez aparece nuevamente por el costado que domina. Una vez más, levanta la mirada y patea el centro al área. Se pierde la defensa rojinegra. El arquero se queda a medio camino. Giovani Hernández salta y de cabeza empuja el 2-1. Chivas recupera la ventaja, al '49.
Hernández es la última joya de la cantera rojiblanca. José Luis Real se ha encargado de impulsarlo con los últimos dos técnicos del Rebaño Sagrado. Debutó con John Van't Schip, en la fecha uno del Apertura 2012, pero se lesionó en sus primeros minutos dentro del máximo circuito. Ahora, con Benjamín Galindo, pelea duro por adueñarse de la titularidad como volante por izquierda. En este Clásico Tapatío, da muestras de su calidad técnica y desequilibrante velocidad. Es el encargado de patear toda pelota parada. A los 19 años, asume un rol protagónico. Y no se asusta.
Atlas, obligado por el marcador, asume la iniciativa de un encuentro que por momentos se torna ríspido. Se ve interrumpido por constantes faltas. Es la pretemporada, pero está en juego la Copa Jalisco y el orgullo. En el diccionario del Clásico, la palabra "amistoso" no existe.
En la agonía del encuentro, la escuadra Rojinegra comete un grave error en la salida. Érick "Cubo" Torres aprovecha, recupera la pelota, encara al arquero y define para el 3-1 definitivo, al '91. Tras el silbatazo final, Leandro Cufré corre hacia la banca rojiblanca. Encara a Benjamín Galindo. Durante el partido ya se habían hecho de palabras. Tras una serie de empujones, el fuego se apaga.
Así, Chivas consigue su quinta victoria de la pretemporada en igual número de partidos y se proclama campeón de la Copa Jalisco. El nuevo uniforme ya puede presumir un título... aunque sea amistoso.